FISOLOFIA SEFARDI:
Desde el punto de vista religioso judío,
la obra filosófica más importante es el
Zohar (El Esplendor), la cual constituye
la esencia de la Cábala, filosofía
mística y esotérica nacida en España y
desarrolada por el Rabino Moises de
León, aunque algunos la atribuyen al
Rabí Shimon Bar Yohai de Tiberíades.
Esta obra contiene una doctrina
"secreta" muy discutible para muchos,
esotérica y profunda en demasía. Otro
gigante de la filosofía sefardí fué
Isaac Israeli, del cual se perdió casi
toda su obra sobreviviendo sólamente el
"Tratado lógico Sobre Definiciones" y
una exposición sobre la física
Aristotélica llamada "Sobre los
Elementos". Otro filósofo es Baruj de
Spinoza, el más grande de los filósofos
judíos y uno de los nombres más
destacados en el pensamiento moderno.
Spinoza es holandés de origen portugués.
Su "Etica" le valió el ostracismo de la
Sinagoga: ningún libro sobre Spinoza
deja de referirse a su puesto en la
historia de la formación de la
mentalidad alemana en su época de
verdadera grandeza, la época de Lessing,
Herdes y Goethe. Para terminar la
filosofía, citemos a Michel de
Montaigne, judío francés del siglo XVI,
uno de los mayores escritores franceses,
cuya madre Antoinette Luppes o López y
padre de apellido Eyquem, eran
"cristianos nuevos" de Catalayud. Sus
"Ensayos" convirtieron la prosa francesa
en un medio literario del orden más
elevado. Las primeras manifestaciones
literarias (siglo X) que aparecen en
España en lengua romance, están
representadas en los poemas denominados
moaxajas o muwasahas y en las jarchas.
Las primeras consisten en estrofas
escritas en árabe o en hebreo o en
romance, esta última estrofa, compuesta
por cuatro versos, que cierra una
moaxaja recibe el nombre farcha. Los
poetas hebreos españoles o
hispano-árabes, dejaron extraordinarias
muestras de este género. Yehuda Ha-Levy
o Abu-l-Hasán ben Shemuel Ha-Levy como
se le conocía dentro de la literatura
árabe, escribe la primera y talvez la
más famosa farcha en esta lengua. Dicha
farcha fué dedicada a Josef Ibn Ferrusel
-médico judío e importante personaje de
la corte de Alfonso VI, en Toledo-
también conocido como el Cidiello, en
esta estrofa celebra su venida a
Guadalajara. Se tomarán dos obras, cuya
lectura e interpretación dan datos sobre
la concepción del judaísmo en Yehuda
Ha-Leví, ellas son: El Cúzary y las
Sionidas. La primera escrita en árabe y
la segunda en hebreo. El poeta como
judío tradicional estudió el Talmud y
recibió el título de Rabino. Decide
inmigrar a Israel hacia el año 1130 pero
sólo diez años después realiza el
anhelado viaje, durante este tiempo el
poeta madura su gran obra: "El Libro de
la Refutación y de la Prueba, Acerca de
la Religión Despreciada", o como también
se le conoce: "El Cúzary" o el "Libro de
Jazar". El Cúzary está compuesto por
cinco discursos o tratados, estos a su
vez están divididos en artículos. La
obra está basada en una historia real
según la cual el rey de los Khozares,
Bulam, con toda su corte y su pueblo
adoptan la fe judía. Yehuda Ha-Levy
recoge esta historia del siglo VIII y a
fin de hacer su lectura de manera
sencilla, presenta a dicho rey en un
diálogo con un filósofo, un cristiano,
un musulman sabio y con un judío
(jaber). La historia del pueblo de
Israel, de permanente tensión,
alimentada por la esperanza de un
regreso a Sión, se convierte así en el
centro del pensamiento de Yehuda Ha
Levy. Esta concepción de que Israel es
la Tierra Santa y que Jerusalem goza de
una protección divina sobrenatural muy
especial, es parte de los sentimientos
de Yehuda HaLevy quien considera que el
retorno a Jerusalem no es mera
aspiración, sino un mandato, una
necesidad imprescindible. En
consecuencia, escrite una serie de
poemas religiosos en los que el Monte
Sion, el monte santo de Jerusalem, es el
centro del deseo, denominados estos
poemas Sionidas, donde el amor a Sión se
refleja tanto como en su obra El Cuzary.
En las Sionidas el poeta canta a la
amada Sión -Jerusalem en la Bíblia- sus
ansias de redención de la tierra así
como también, desea el retorno de su
pueblo a la tierra de sus antepasados.
Así comienza una de las estrofas de las
Sionidas, el occidente es España, la
diáspora, el oriente, Israel. El poeta
se encuentra en la diáspora pero su
corazón está siempre en Israel. Este
poema refleja el estado emocional
permanente del judío que vive en la
diáspora. Este poema fué escrito en una
fecha en la cual Israel estaba bajo el
dominio de los cruzados, y España (Al
Andalus) bajo dominio árabe. Yehuda
Ha-Levy intentó a través de sus obras, y
tal como se pudo demostrar
anteriormente, rescatar los valores del
judío de la Edad Media.