Organizacion Sin Animo de Lucro
Adscrita al Judaismo Ortodoxo Moderno
Desde Monsey, New York
Haftara Devarim Ki Tavó
CONVIERTASE EN BENEFACTOR
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SEPHARDIC PRONUNCIATION
הגייה ספרדית
Haftara Devarim Ki Tavó
Isaías 54:1-10 Parashá Bamidbar -En el Desierto
Aliyot Devarim KiTavó
Lectura Mediante Robot - Deuteronomio Capítulo 26:1 al
29:8 e Isaías 60:1 - 22
Por Eliyahu BaYonah Ben Yossef,
Director Shalom Haverim Org. New
York
Aliyot es el plural hebreo de
Aliá o Aliyá que significa
"subir". Cada vez que una
persona - Olé- sube a la Bimá
debe recitar la Braja
-Bendicion- antes de comenzar el
Baal Koréh -בעל
קורא -
la Lectura y al cerrar la misma.
Esto se hace cada vez que el
Baal Koréh lee la Porción
-Parashá- correspondiente.
El Maftir es la última persona
que se llama a la Bimá y es
invitada a leer la porción de la
Haftará -Profetas-
Esta es la Brajá
de la Lectura de la Toráh:
Barejú et Adonai hamevoraj. |
Baruj Adonay hamevoraj le'olam va'ed. |
Baruj atáh Adonay Eloheynu melej ha'olam, asher bajar banu
mikol-ha'amim, venatan
lanu et-torato. |
Baruj atáh Adonai, notén hatoráh. |
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LECTURA DE LA HAFTARÁ Isaías
60:1 - 22
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Baruj atáh Adonay
jabóker batoráh uveMoshé
avdó uveYisra'el amó
uvinvi'ey ja'emet
vatsédek. |
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Vehalju goyim le'orej
umelajim lenogah zarjej. |
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Ne'eman, atah ju Adonay
Eloheynu, vene'emanim
devareyja, vedavar ejad
midvareyja ajor
lo-yashuv reykam, ki El
melej ne'eman verajaman
atah. |
Baruj atáh Adonay, ha'El
jane'eman
bekol-devarav. -Amen |
Rajem al-Tsiyon, ki ji
beyt jayeynu, vel'aluvat
nefesh toshia bimjeraj
veyameynu. |
Baruj atáh Adonay,
mesame'aj Tsiyon
bevaneyj. |
Samejenu, Adonay
Eloheynu, be'Eliyahu
janavi avdeja, uvmaljut
beyt David meshijeja.
Bimjeraj yavo veyagel
libenu, |
al kis'o lo yeshev zar,
velo yinjalu od ajerim
et kevodo, ki veshem
kodsheja nishbata lo,
shelo yicbej nero
le'olam va'ed. |
Baruj atáh Adonay, magén
David. |
EN ESPAÑOL
Aliyot Devarim KiTavó
Lectura Mediante Robot - Deuteronomio Capítulo 26:1 al
29:8 e Isaías 60:1 - 22
Por Eliyahu BaYonah Ben Yossef,
Director Shalom Haverim Org. New
York
Aliyot es el plural hebreo de
Aliá o Aliyá que significa
"subir". Cada vez que una
persona - Olé- sube a la Bimá
debe recitar la Braja
-Bendicion- antes de comenzar el
Baal Koréh -בעל
קורא -
la Lectura y al cerrar la misma.
Esto se hace cada vez que el
Baal Koréh lee la Porción
-Parashá- correspondiente.
El Maftir es la última persona
que se llama a la Bimá y es
invitada a leer la porción de la
Haftará -Profetas-
Esta es la Brajá de la
Lectura de la Toráh:
¡Bendecid al Eterno, el
Bendito! |
Bendito es el Eterno, el
Bendito para siempre. |
Bendito seas Tu, oh
Eterno nuestro Dios, Rey
del universo que nos
elegiste entre todos los
pueblos y nos diste Tu
Toráh, Bendito seas, oh
Eterno, que nos
concediste la Toráh. |
Bendito seas, oh Eterno,
que nos concediste la
Toráh. AMEN
|
|
tomarás de las primicias
de todos los frutos del
suelo, que recogieres de
la tierra que el Eterno,
tu Dios, te da; y las
pondrás en un canasto, e
irás al lugar que
escogiere el Eterno, tu
Dios, para hacer habitar
allí su nombre; |
y te llegarás al (sumo)
sacerdote que hubiere en
aquellos días, y le
dirás: Yo declaro hoy al
Eterno, tu Dios, (y le
manifiesto mi gratitud)
porque he entrado en la
tierra que juró el
Eterno a nuestros padres
que nos daría. |
Y tomará el sacerdote el
canasto de tu mano, y
colocará delante del
altar del Eterno, tu
Dios. |
Y hablarás en voz alta y
dirás en presencia del
Eterno, tu Dios: Un
arameo (Laván) quiso
hacer perecer a mi
padre, el cual bajó a
Egipto y moró allí con
poca gente, y allí vino
a ser una nación grande,
fuerte y numerosa. |
Y nos trataron mal los
egipcio)s, y nos
oprimieron, y nos
impusieron dura
servidumbre. |
Y clamamos al Eterno, el
Dios de nuestros padres,
y el Eterno cayó nuestra
voz, y miró nuestra
aflicción y nuestra
fatiga y nuestra
opresión; |
y nos sacó el Eterno de
Egipto con poder fuerte
y con brazo extendido, y
con terror grande, y con
señales, y con
maravillas, |
y nos ha traído a este
lugar, y nos ha dado
esta tierra, tierra que
mana leche y miel. |
Y ahora, he aquí que
traigo las primicias de los frutos del suelo que Tú me has dado, oh Eterno.
Y colocarás (el canasto)
delante del Eterno, tu
Dios, y te postrarás
delante del Eterno, tu
Dios; * |
y te regocijarás con
todo el bien que el
Eterno, tu Dios, te ha
dado a ti y a tu casa,
así tu como el levita y
el extranjero que moran
en medio de ti. |
|
y dirás delante del
Eterno, tu Dios: He
sacado de mi casa lo que
está consagrado, y
también Yo he dado al
levita, al extranjero,
al huérfano y a la
viuda, conforme a todo
lo que me has ordenado;
no cambié nada e hice
según tus preceptos, y
no me olvidé de ellos |
No comí del segundo
diezmo en mi primer día
de luto, ni comí de él
estando yo impuro, ni lo
he cambiado para los
funerales de un muerto.
He obedecido la voz del
Eterno, mi Dios, y he
hecho según todo lo que
me has ordenado. |
Mira desde tu santa
morada, desde el cielo,
y bendice a tu pueblo
Israel y al suelo que
nos diste, según juraste
a nuestros padres;
tierra que mana leche y
miel. |
|
Hoy has ensalzado al
Eterno para que sea Dios
tuyo, y para andar en
sus caminos y guardar
sus estatutos y sus
preceptos y sus juicios,
y para obedecer su voz. |
Y el Eterno te ha
ensalzado hoy para que
seas para El su pueblo
predilecto como te lo ha
hablado, y para. que
observes todos sus
preceptos, |
a fin de que El te
ensalce sobre todas las
naciones que hizo; (te
exaltó) en loor, en fama
y en gloria, y a fin de
que tú seas un pueblo
santo para el Eterno, tu
Dios, como El habló. |
|
Y sucederá que en el día
que pasáreis el Jordán,
a la tierra que el
Eterno, tu Dios, te da,
harás erigir para. ti
piedras grandes y las
revocarás con cal; |
y escribirás sobre ellas
todas las palabras de
esta Ley mientras pasas,
para que entres en la
tierra que el Eterno, tu
Dios, te da; tierra que
mana leche y miel, así
como el Eterno, Dios de
tus padres, te habló. |
Y cuando hubiereis
pasado el Jordán,
erigiréis estas otras
piedras que yo os ordeno
hoy, en el monte Eval, y
las revocaréis con cal. |
Y edificarás allí un
altar al Eterno, tu
Dios, un altar de
piedras; no alzarás
hierro sobre ellas. |
De piedras enteras
edificarás el altar del
Eterno, tu Dios; y
ofrecerás sobre él
holocaustos al Eterno,
tu Dios. |
Y ofrecerás sacrificios
de paces, y comerás allí
y te regocijarás ante el
Eterno, tu Dios. |
Y escribirás sobre las
piedras. todas las
palabras de esta Ley,
explicándolas bien. |
Y hablaron Moisés y los
sacerdotes levitas a
todo Israel, diciendo:
¡Atiende y escucha, oh
Israel! Hoy has venido a
ser pueblo del Eterno,
tu Dios. |
Obedecerás a la voz del
Eterno, tu Dios, y
cumplirás sus preceptos
y sus estatutos que yo
te ordeno hoy. |
|
Estos estarán, para
bendecir al pueblo,
sobre el monte Guerizim,
cuando hubiereis pasado
el Jordán: Simón y Leví
y Judá e Isajar y José y
Benjamín. |
Y éstos estarán para
maldecir sobre el monte
de Kval: Ruben, Gad y
Asher y Zebulón, Dan y
Naftalí. |
Y tomarán la palabra los
levitas y dirán a todos
los hombres de Israel
con voz alta: |
¡Maldito el hombre que
hiciere escultura o
imagen de fundición,
cosa abominable al
Eterno, obra de mano de
artífice, y la pusiere
en lugar secreto!
Y responderá todo el
pueblo y dirá: ¡Amen! |
¡Maldito sea el que
menospreciare a su padre
y a su madre! Y dirá
todo el pueblo: ¡Amen! |
¡Maldito aquel que
removiere los límites
(para disminuir el
terreno) de su prójimo!
Y dirá todo el pueblo:
¡Amen! |
¡Maldito aquél que
hiciere errar al ciego en el camino! Y dirá todo el
pueblo: ¡Amen! * |
¡Maldito aquél que
torciere el derecho del
extranjero, del huérfano
y de la viuda!
Y dirá todo el pueblo:
¡Amen! |
¡Maldito aquél que se
acostare con la mujer de
su padre (o con la mujer
destinada a su padre por
la ley de levirato),
porque es el lecho de su
padre!
Y dirá todo el pueblo:
¡Amen! |
¡Maldito aquél que se
echare con cualquier
bestia! Y dirá todo el
pueblo: ¡Amen! |
¡Maldito aquél que se
acostare con su hermana,
hija de su padre o hija
de su madre!
Y dirá todo el pueblo:
¡Amen! |
¡Maldito aquél que se
acostare con su suegra!
Y dirá todo el pueblo:
¡Amen! |
¡Maldito aquél que hiriere ocultamente a su prójimo! Y dirá todo el
pueblo: ¡Amen! * |
¡Maldito aquél que
tomare soborno para
matar a alguien,
derramando la sangre
inocente!
Y dirá todo el pueblo: ¡Amen! |
¡Maldito aquél que no
perseverare en las
palabras de esta ley
para cumplirlas!
Y dirá todo el pueblo:
¡Amen! |
Y si escuchares
atentamente la voz del
Eterno, tu Dios, para
guardar y cumplir todos
sus preceptos que yo te
ordeno hoy, el Eterno,
tu Dios, te ensalzará
sobre todas las naciones
de la tierra. |
Y vendrán sobre ti y te
alcanzarán todas estas
bendiciones cuando
obedecieres la voz del
Eterno, tu Dios: |
Bendito serás en la ciudad y bendito serás en el campo. * |
Bendito será el fruto de
tu vientre, y el fruto
de tu tierra, y el fruto
de tus bestias, y la
cría de tu ganado, y los
rebaños de tus ovejas. |
Bendito será tu canasto y tu artesa. * * |
Bendito serás en tu
entrada y bendito serás
en tu salida. |
|
El Eterno mandará que la bendición esté contigo en tus graneros y en toda empresa de tu mano; y te
bendecirá en la tierra
que el Eterno, tu Dios,
te da. * |
El Eterno te establecerá
por pueblo santo suyo,
como te tiene jurado,
cuando guardares los
mandamientos del Eterno,
tu Dios, y anduvieres en
sus caminos; |
y verán todos los
pueblos de la tierra que
el nombre del Eterno es
invocado sobre ti, y te
temerán. |
Y el Eterno te hará
abundar, para bien tuyo,
en el fruto de tu
vientre, en el fruto de
tus bestias, y en el
fruto de tu suelo, sobre
la tierra que el Eterno
juró a tus padres que te
daría. |
Abrirá el Eterno para ti
su buen tesoro, los
cielos, para dar la
lluvia a tu tierra en su
tiempo, y para bendecir
toda empresa de tu mano;
y prestarás a mucha
gente, mas tú no tomarás
prestado. |
Y te pondrá el Eterno
por cabeza y no por
cola; y estarás encima
solamente, y no estarás
debajo, cuando
escuchares los
mandamientos del Eterno,
tu Dios, que yo te
ordeno hoy, para
guardarlos y cumplirlos; |
y no te desviarás de
ninguna de las cosas que
os prescribo hoy, ni
hacia la derecha ni
hacia la izquierda,
andando en pos de otros
dioses para servirlos. |
Y si no obedecieres la
voz del Eterno, tu Dios,
para guardar y cumplir
todos sus mandamientos y
sus estatutos que yo te
ordeno hoy, vendrán
sobre ti y te alcanzarán
todas estas maldiciones: |
Maldito serás en la
ciudad y maldito serás
en el campo. |
Malditos serán tu
canasto y tu artesa. |
Maldito será el fruto de
tu vientre, y el fruto
de tu tierra, y la cría
de tu ganado, y los
rebaños de tus ovejas. |
Maldito serás en tu
entrada y maldito serás
en tu salida. |
Enviará el Eterno sobre
ti la maldición, la
turbación y la
reprensión en toda
empresa de tu mano que
tratares de hacer, hasta
que seas destruido y
hasta que perezcas en
breve, a causa de la
maldad de tus obras, por
haberme dejado. |
Hará el Eterno que se te
pegue la peste, hasta
que te consuma de sobre
la tierra a la cual vas
para poseerla. |
Te herirá el Eterno de
tisis, y de fiebre, y de
inflamación, y de ardor,
y por medio de la
espada; y de sequía, y
de tizón en tus
renuevos; y te
perseguirán hasta que
perezcas. |
Y los cielos que están
sobre tu cabeza serán de
cobre, y la tierra que
está debajo de ti, de
hierro. |
EI Eterno dará con la
poca lluvia de tu
tierra, polvo y ceniza;
desde los cielos
descenderán sobre ti
hasta. que seas
destruido. |
Hará el Eterno que seas
derrotado ante tus
enemigos. Por un camino
saldrás contra él, mas
por siete caminos huirás
delante de él; y
servirás de ejemplo
horrible a todos los
reinos de la tierra. |
Y será tu cadáver por
pasto a todas las aves
del cielo y a las
bestias de la tierra; y
no habrá quien las
espante. |
El Eterno te herirá con
la sarna de Egipto, y
con hemorroides, y con
sarna húmeda, y con
sarna seca, de que no
podrás ser curada. |
El Eterno te herirá con
locura, y con ceguera, y
con aturdimiento de
corazón; |
y palparás a mediodía como palpa un ciego en las tinieblas; y no prosperarás en tus caminos, y sólo
serás oprimido y
despojado todos los
días, y no habrá quien
te salve. @ |
Con mujer te desposarás,
mas otro hombre se
acostará con ella.; casa
edificarás, mas no
habitarás en ella; viña
plantarás, mas no
recogerás ni aun sus
primeros frutos. |
Tu buey será degollado
ante tus ojos, mas tú no
comerás de él; tu asno
será arrebatado en tu
misma presencia y no
volverá a ser tuyo; tus
rebaños serán entregados
a tus enemigos, y no
habrá quien los libre. |
Tus hijos y tus hijas
serán dados a otro
pueblo, y tus ojos
mirarán y desfallecerán
por ellos todo el día,
sin que tu mano pueda.
hacer nada. |
El fruto de tu tierra y
toda tu labor, lo comerá
un pueblo que tú no
conociste; y serás
ciertamente oprimido y
quebrantado todos los
días, |
y te volverás loco por
la visión que tus ojos
han de ver. |
Te herirá el Eterno con
sarna maligna. en las
rodillas y en las
piernas, de la. que no
podrás ser curado; y aún
desde la planta de tu
pie hasta. tu mollera. |
El Eterno te hará ir, a
ti y al rey que habrás
puesto sobre ti, a
nación que no has
conocido, ni tú ni tus
padres; y allá servirás
a otros dioses de palo y
de piedra. |
Y tú vendrás a. ser un
espanto y un proverbio y
un escarnio entre todos
los pueblos adonde te
conducirá el Eterno. |
Mucha simiente producirá
el campo, mas poco
recogerás, porque lo
consumirá la langosta. |
Viñas plantarás y
cultivarás, mas no
beberás vino ni cogerás
uvas, porque las comerá
el gusano. |
Olivos tendrás en todo
tu territorio, mas no te
ungirás con aceite,
porque tus olivos
dejarán caer su fruto. |
Hijos e hijas
engendrarás, mas no
serán para ti, porque
irán en cautiverio. |
Todos tus árboles y el
fruto de tu tierra los
empobrecerá la langosta. |
El extranjero que
habitare en medio de ti
se elevará sobre ti más
y más alto, en tanto que
tú descenderás más y más
bajo. |
El te prestará a ti, mas
tú no le prestarás a él;
él será cabeza y tú
serás cola. |
Y vendrán sobre ti todas
estas maldiciones p te
perseguirán y te
alcanzarán hasta que
seas destruido, porque
no habrás obedecido la
voz del Eterno, tu Dios,
guardando sus
mandamientos y sus
estatutos que El te
ordenó; |
y ellas (las
maldiciones) serán para
ti por señal y por
maravilla, como también
en tu descendencia para
siempre. |
En trueque de no haber
servido al Eterno, tu
Dios, con alegría y con
regocijo de corazón
cuando abundaba todo, |
servirás a tus enemigos
que el Eterno enviará
contra ti, (les
servirás) en hambre, y
en sed, y en desnudez, y
en necesidad de todo; y
él colocará un yugo de
hierro sobre tu cuello,
hasta que te haya
destruido. |
Alzará el Eterno sobre
ti una nación que viene
de lejos, desde el
extremo de la tierra, a
la manera que vuela el
águila; nación cuya
lengua no entenderás; |
nación grosera, que no
tendrá respeto al
anciano, y del muchacho
no tendrá compasión; |
y ella comerá la cría de
tus animales y el fruto
de tu tierra hasta que
seas destruido, porque
no dejará renacer para
ti cereal, ni mosto, ni
aceite, ni la cría de
tus vacas, ni rebaños de
tus ovejas, hasta que te
haya exterminado. |
Te sitiará en todas tus
ciudades, hasta hacer
caer los muros altos y
fuertes en que
confiabas, en toda tu
tierra; y te sitiará en
todas tus ciudades, en
toda la tierra que te
habrá dado el Eterno, tu
Dios. |
Y comerás el fruto de tu
vientre, la carne de tus
hijos y de tus hijas que
te hubiere dado el
Eterno, tu Dios, por
causa del asedio y la
estrechez con que te
oprimirá tu enemigo. |
El hombre tierno y muy
mimado entre vosotros,
su ojo será maligno para
con su hermano, y para
con la mujer de su seno,
y para con el resto de
sus hijos que le
quedaren, |
para no dar a ninguno de
ellos de la carne de sus
hijos que él comerá, por
no haberle quedado nada
en el asedio y en la
estrechez con que te
oprimirá tu enemigo,
dentro de todas tus
ciudades. |
La (mujer) tierna y
mimada en medio de ti,
que por mimo y
delicadeza no probó a
poner la planta de su
pie sobre el suelo, su
ojo será maligno para
con el hombre de su
seno, y para con su hijo
y su hija, |
así como para sus hijos
muy pequeños (que se
arrastran) entre sus
pies y para sus hijos
que hubiere parido;
porque ella sola los
comerá ocultamente en la
falta de todo, en el
asedio y en la estrechez
con que te oprimirá tu
enemigo dentro de tus
ciudades. |
Si no guardares para cumplir todas las palabras de esta Ley, las que están
escritas en este libro, para que temas este nombre glorioso y temible, al Eterno, tu Dios, * * |
hará el Eterno que tus
heridas y las heridas de
tu descendencia sean
diferentes a las de los
demás; fieles (al
mandato de Dios),
enfermedades malignas y
fieles. |
Y volverá a traer sobre
ti todas las dolencias
de Egipto de que tuviste
temor, y ellas se te
pegarán. |
También todas las
enfermedades y todas las
heridas que no están
escritas en este Libro
de la Ley, las traerá el
Eterno sobre ti, hasta
que seas destruido. |
Y quedaréis pocos
hombres, después de
haber sido vosotros como
las estrellas del cielo
en muchedumbre, porque
tú no obedeciste la voz
del Eterno, tu Dios. |
|
Y sucederá que así como
se regocijaba. el Eterno
en vosotros para haceros
bien y para
multiplicaros, así hará regocijar el Eterno (a vuestros enemigos) para haceros perecer y para
destruiros, y seréis
arrancados de sobre la
tierra adonde vais para
tomar posesión. * |
Y te esparcirá el Eterno
entre todos los pueblos,
desde un extremo de la
tierra hasta el otro
extremo de la tierra; y
servirás allí a otros
pueblos servidores de
otros dioses que no has
conocido ni tú ni tus
padres, (dioses) de palo
y de piedra. |
Y entre aquellas
naciones no tendrás
reposo, ni habrá
descanso para la planta
de tu pie; pues allí te
dará el Eterno corazón
agitado, y desesperanza
de salvación, y dolor de
alma. |
Y tu vida estará como en
suspenso ante ti; pues
te atemorizarás de noche
y de día., y no tendrás
garantizada tu
manutención. |
Por la mañana dirás: "
¡Ojalá fuera como la
tarde de ayer! " y por
la tarde dirás: "¡Ojalá
fuera como esta
mañana!", por el temor
de tu corazón que
sentirás y por la.
visión que verás con tus
ojos. |
Y el Eterno te hará volver en cautiverio a Egipto en navíos, de cuyo camino yo te dije : "no volverás
más a verle", y allí
desearéis ser vendidos
por esclavos y por
esclavas a vuestros
enemigos y no habrá
quién os compre, (porque
seréis condenados a
muerte). * |
Estas son las palabras
del pacto que el Eterno
ordenó a Moisés que
celebrase con los hijos
de Israel en la tierra
de Moav, además del
pacto que celebró con
ellos en Horev. |
|
las grandes pruebas que
han visto tus ojos, las
señales y aquellas
grandes maravillas; |
pero hasta el día de hoy
no os ha dado el Eterno
corazón que entienda, ni
ojos que vean, ni oídos
que oigan. |
Y yo os he conducido
cuarenta años por el
desierto; no han
envejecido los vestidos
sobre vosotros, ni se ha
gastado el calzado sobre
tu pie. |
No habéis comido pan ni
habéis bebido vino nuevo
ni añejo; para que
supieseis que Yo soy el
Eterno, vuestro Dios. |
|
y apoderándonos de su
tierra la dimos por
herencia a los rubenitas
y a los gaditas y a la
media tribu de Manasé. |
Y guardaréis las
palabras de este pacto y
las cumpliréis, para que
prosperéis en todo lo
que hiciereis. |
|
Bendito seas Tu oh
Eterno nuestro Dios, Rey
del Universo que nos
diste (Tu Torah), la
Toráh de la Verdad, e
implantaste en nosotros
la Vida Eterna. |
Bendito seas, oh Eterno,
que nos concediste la
Toráh. (TODOS
DICEN AMEN) |
LECTURA DE LA HAFTARÁ Isaías
60:12 - 22
Bendito seas Tú, Eterno
Dios nuestro y Rey del
Universo, que escogiste
buenos profetas y te
complaciste en sus
palabras, que fueron
enunciadas con verdad. |
Bendito seas Tú, Eterno,
que escogiste la Torah,
a Moisés Tu siervo, a Tu
pueblo Israel y a
profetas de la verdad y
y de la rectitud. |
|
¡Levántate, ilumina (oh
Sión), porque ha venido
tu luz, y la gloria del
Eterno ha resplandecido
sobre ti. |
Pues he aquí que aunque
la oscuridad cubra la
tierra y tinieblas a las
naciones, sobre ti
resplandecerá el Eterno,
y en ti será vista su
gloria. |
Y naciones se
encaminarán hacia tu
luz, y reyes hacia el
brillo de tu esplendor. |
¡Alza tus ojos y mira
alrededor! Todos se
reúnen y vienen a ti:
tus hijos vendrán de
lejos, y tus hijas por
reyes serán llevadas. |
Entonces tú lo verás y
estarás radiante; y se
plasmará tu corazón y se
ensanchará de júbilo,
porque la abundancia de
riquezas de los pueblos
del oeste regresará a
ti, los caudales de las
naciones vendrán a ti. |
Multitud de camellos
llenos de presentes
cubrirán tu tierra,
camellos jóvenes que
vienen de Midián y de
Efá; todos los hijos de
Saba vendrán y traerán
oro e incienso, y
anunciarán las alabanzas
del Eterno. |
Todos los rebaños de
Kedar serán juntados
para llevarlos a ti, los
carneros de Nevayot
servirán para tus
necesidades; para mi
agrado subirán a mi
altar; y tornaré más
gloriosa la casa de mi
gloria. |
¿Quienes son éstos que
vienen volando como la
nube. y como las palomas
hacia sus palomares? |
Porque a Mí se reunirán
los moradores de las
islas con las naves de
Tarshish a la cabeza,
para traer de lejos a
tus hijos y con ellos su
plata y su oro, por amor
al nombre del Eterno, tu
Dios, y a causa del
Santo de Israel; porque
El te glorifica. |
Asimismo los hijos de
tierra extraña
edificarán tus muros, y
sus reyes te asistirán;
porque en mi ira te
herí, mas en mi
clemencia tuve compasión
de ti. |
Y tus puertas estarán
abiertas de continuo; y
no se cerrarán ni de día
ni de noche, para que te
sean traídas las
riquezas de las
naciones, y con ellas
conducidos sus reyes. |
Porque la nación o el
reino que no te
sirviere, perecerá;
estas naciones serán
totalmente asoladas. |
Los cedros gloriosos del
Líbano vendrán a ti; el
ciprés, el pino y el boj
juntamente, para
hermosear el lugar de mi
Santuario; y Yo haré
glorioso el lugar de mis
pies. |
Asimismo vendrán a ti
inclinándose los hijos
de los que te
oprimieron, y hasta las
plantas de tus pies se
encorvarán todos los que
te trataron con
desprecio; y te llamarán
"ciudad del Eterno",
"Sión del Santo de
Israel". |
En vez de estar
abandonada y aborrecida,
de modo que nadie pasaba
por ti, haré que seas
una gloria perpetua, el
gozo de todas las
generaciones. |
Y te alimentarás con la
crema de las naciones, y
mamarás al pecho de los
reyes; y sabrás que Yo,
el Eterno, soy Salvador
tuyo, y que tu Redentor
es el Poderoso de Jacob. |
En lugar del cobre que
te quitarán, traeré oro,
y en vez de hierro,
traeré plata, y en vez
de madera, cobre, y en
lugar de piedras,
hierro; y haré que los
cobradores de impuestos
vengan a ti para
preguntar por tu paz, y
tus opresores a inquirir
tu benevolencia. |
No se oirá hablar más de
violencia en tu tierra,
de saqueo y de
disturbios en tus
términos, sino que
llamarás a tus muros
"salvación", y a tus
puertas "alabanza al
Eterno". |
No necesitarás más la
luz del sol para
iluminarte de día, ni
del esplendor de la luna
en la noche; porque el
Eterno mismo te servirá
de luz perpetua, y tu
Dios será tu gloria. |
No se pondrá más tu sol,
ni tu luna se retirará
(no se acabará más tu
reino y tu gobierno);
porque el Eterno será tu
luz eterna, y los días
de tu duelo se habrán
acabado ya. |
Y los que quedarán de tu
pueblo, todos ellos
serán justos, ellos
heredarán para siempre
la tierra; renuevo
plantado por Mí mismo,
obra de mis manos es él
(mi pueblo), y por él
seré glorificado. |
La tribu menor vendrá a
ser mil veces más, y la
joven vendrá a ser una
nación fuerte; Yo, el
Eterno, haré esto a su
tiempo, o lo apresuraré
(si lo merecen). |
Bendito seas Tú, Eterno,
Dios nuestro y Rey del
Universo, fuerte de
todos los mundos, justo
en todas las
generaciones; Dios fiel,
que dice y obra, que
promete y cumple, cuyas
palabras son verdad y
justicia. |
Fiel eres Tú, Eterno,
Dios nuestro, y tus
promesas son merecedoras
de fe; ninguna de Tus
palabras dejará de
cumplirse, porque Tú
eres Dios y Rey fiel (y
piadoso). |
Bendito seas Tú, Eterno,
Dios fiel en todas tus
palabras. -Amen |
Ten piedad de Sión, pues
es el hogar de nuestra
vida, y salva a esa
ciudad afligida de
espíritu, pronto y en
nuestros días. |
Bendito seas Tú, Eterno,
que alegras a Sión en
sus hijos. |
Alégranos, oh Eterno,
Dios nuestro, con la
llegada de Elías, tu
profeta y servidor, y
con el reinado de David
tu ungido. Llegue pronto su
advenimiento y haga
regocijar nuestros
corazones. |
No permitas que extraños
se sienten en su trono,
ni que otros hereden de
su gloria, pues por tu
santo nombre le juraste
que su luz jamás se
extinguirá. |
Bendito seas Tú, Eterno,
Escudo de David. |
Resumen de la Parashá
Cuando los Hijos de Israel moran
en la Tierra de Israel, sus
primeros frutos son llevados al
Templo y donados al Cohen en una
ceremonia que expresa el
reconocimiento de que Dios guia
la historia del Pueblo Judío a
través de los tiempos. Este
pasaje forma la parte central de
la Hagada que leemos en el Seder
de Pesaj. En el último día de
Pesaj en el cuarto y séptimo año
del ciclo de siete años de los
diezmos, una persona debe
recitar una confesión de que
realmente ha distribuído los
diezmos a las personas
correctas, de la manera
correcta. Con esta mitzvá de
"Vidui Maaser", Moshé concluye
con los mandamientos que Dios le
dijo que enseñe al Pueblo Judío.
Luego le pide al pueblo emular
los caminos de Dios, ya que
ellos son un tesoro para El.
Cuando los Hijos de Israel
cruzan el río Jordán, hacen un
nuevo pacto con la Torá. Grandes
piedras son puestas y la Torá es
escrita en ellas en las 70
lenguas principales del mundo,
después de lo cual se las cubre
con una fina capa de yeso. Mitad
de las Tribus van a estar en el
Monte Gerizim, la otra mitad en
Monte Eval, y los Leviim en el
valle entre las dos montañas, y
recibirán doce mandamientos.
Todas las personas contestarán
"Amén" a las bendiciones y a las
maldiciones.
Luego Moshé detalla las
bendiciones que serán otorgadas
al Pueblo de Israel. Estas
bendiciones son tanto físicas
como espirituales. Sin embargo,
Moshé describe para ellos un
escalofriante cuadro de
destrucción que caerá sobre
ellos si no cumplen con las
enseñanzas de la Torá -- siendo
el resultado de esto el exilio
donde deambularán entre las
naciones.
Comentarios a la Parashá
.
"Y será, el día que crucéis el
Jordán a la Tierra que Hashem
vuestro Dios os da. Y erigiréis
para vosotros grandes piedras y
las cubriréis de yeso... y
escribiréis sobre las piedras
todas las palabras de esta Torá
con una clara explicación"
(27:2-8)
Si vas manejando por la
carretera A38 en dirección a la
Planicie de Salisbury, en
Inglaterra, a la distancia vas a
ver un extraño amontonamiento de
piedras enormes erigidas en
forma de círculo. Esas piedras
se llaman "Stonehenge".
Stonehenge se construyó entre
trescientos y mil años después
de que el pueblo judío saliera
de Egipto, Su origen y su
propósito siguen siendo un
misterio. Hay quienes dicen que
Stonehenge era un templo
druídico. Otros sostienen que
era un observatorio astronómico.
Y también hay quienes afirman
que es el sitio de la tumba del
Rey Arturo.
Cuando las naciones del mundo
desean inmortalizar sus
conquistas, erigen grandes
piedras como monumentos a su
poder militar y a su dominio.
Pero cuando los judíos ponen
grandes piedras es porque se les
ordenó que escriban en ellas
"todas las palabras de esta
Torá".
Los druidas y el Rey Arturo son
figuras espectrales, que se han
ido desvaneciendo con el tiempo,
mientras que ¡Am Israel Jai!, el
pueblo de Israel y la Torá de
Moshe, viven y perduran por
siempre.
Don Isaac Abarbanel
"Porque no servisteis a Hashem,
vuestro Dios, con alegría y
bondad de corazón..." (28:47)
Leer la parashá de esta semana
es como ver una escena en cámara
lenta donde dos autos están a
punto de chocar. No se puede
menos que sentir un escalofrío
al leer las serias advertencias
de lo que ocurrirá si el pueblo
no cumple con la Torá, y
compararlas luego con la triste
realidad de la historia judía.
Una de las predicciones más
poderosas que hace la Torá es
que se ha de castigar al pueblo.
"Porque no servisteis a Hashem,
vuestro Dios, con alegría y
bondad de corazón...". ¿Por qué
la Torá no se refiere a la
idolatría, a la inmoralidad, al
odio porque sí? ¿Acaso no son
causas mucho más justificables
del exilio y la tragedia? ¿Qué
tiene de malo no servir a Dios
"con alegría y bondad de
corazón"? ¿Por qué tan terribles
consecuencias?
Cuando le pides a un compañero
que te ayude a lavar los platos,
te puedes dar cuenta de si
verdaderamente está dispuesto a
ayudar o no. Si te dice:
"Ejem... ¿por ahí te puedo
ayudar en alguna otra cosa?", su
ofrecimiento de ayuda es
sincero. Pero si dice: "Justo
ahora me estaba por ir...",
entonces estáte seguro de que
todo el tiempo tenía un pie
afuera...
Del mismo modo, cuando el pueblo
judío no sirvió a Hashem "con
alegría y bondad de corazón",
esto es síntoma de que toda su
motivación para servir a Hashem
es egoísta.
El pueblo adoraba a ídolos
porque quería controlar a sus
deidades. Pensaban que podían
"comprar" al dios de la lluvia
con un par de sacrificios. O que
podían hacer que el dios del sol
hiciera lo que ellos querían a
cambio de unas cuantas
libaciones. Al servir a Hashem
sin alegría ni bondad de
corazón, el pueblo judío está
revelando que se relacionan con
Dios de un modo idólatra:
tratando de "comprar" a Hashem a
cambio de un mero servicio
"mecánico".
Rabí Yojanan Zweig, oído de boca de Rabí Moshe Zauderer
"Y el Kohen tomará el canasto de
tus manos..." (26:4)
Las manos son únicas.
Las manos son diferentes de
todos los otros miembros del
cuerpo. Los otros miembros del
cuerpo son fijos, estáticos,
mientras que las manos pueden
bajarse por debajo de los pies o
pueden elevarse por encima de la
cabeza.
Lo mismo ocurre a un nivel
alegórico/ético. El hombre puede
bajar las manos, vale decir,
rebajarse hasta lo más bajo.
Puede cometer el peor de los
pecados. Puede asesinar. Puede
robar. Todo puede hacerlo con
las manos. Del asesino se dice:
"tiene las manos manchadas de
sangre".
Pero las manos también pueden
elevarse. Pueden realizar los
actos más sublimes. Cuando el
Kohen bendice al pueblo, alza
las manos. Las manos dan tzedaká
(caridad). Las manos ponen
tefilín. Extendemos la "mano" de
la amistad y la ayuda.
La obra de la persona está
simbolizada en las adquisiciones
que le trajeron sus manos. Por
eso, los primeros frutos deben
consagrarse como Bikurim.
Como el comienzo siempre influye
en lo que sigue, todos los
comienzos deben ser sagrados.
Porque cuando el comienzo es
sagrado, todo lo que venga
después también habrá de serlo.
Cuando las manos se elevan por
encima de la cabeza, cuando se
alzan en dirección al cielo, la
cabeza y el cuerpo
inevitablemente irán tras ellas.
Rabí Shlomo Yosef Zevin
"Y clamamos a Hashem, el Dios de
nuestros padres, y Hashem oyó
nuestras voces..." (26:7)
En momentos de apuros no basta
con rezar. Hace falta clamar,
gritarle a Hashem, y entonces El
nos responde en forma inmediata.
Fíjate que en el versículo no
dice que Hashem oyó nuestras
plegarias, sino que ¡Hashem oyó
nuestras voces!
Y aunque todas las plegarias
obtengan respuesta, hay
plegarias que tardan días en
responderse... y hay plegarias
que tardan años.
La esencia del rezo siempre
debera ser para toda la
comunidad, y el momento ideal:
después de hacer una mitzvá.
El Jafetz Jaim
NOTAS EXPLICATORIAS:
|
Y ahora, he aquí que
traigo las primicias de los frutos del suelo que Tú me has dado, oh Eterno.
Y colocarás (el canasto)
delante del Eterno, tu
Dios, y te postrarás
delante del Eterno, tu
Dios; * |
Las Primicias de los Frutos
Esta parashá trata al
principio del mandamiento del havaat
habicurim (entrega de las
primicias), que solemnemente se
llevaba cada año al Templo de
Jerusalem. En la Mishná (Maséjet
Bicurim) se relata esta
ceremonia de la siguiente
manera: ¿Cómo se separaban las
primicias? -Cuando el hombre iba
a su campo y veía higos maduros,
uvas maduras, granadas maduras,
los marcaba y los consagraba
diciendo: ¡Sean éstos bicurim!
(primicias para la ofrenda).
¿Cómo se traían las primicias a
Jerusalem? -Todas las aldeas de
la región se reunían en la aldea
principal, y dormían en las
calles. Por la mañana, llamaban
al dirigente diciendo: ¡Venid y
subiremos a Sión, a la Casa de
nuestro Dios! Se encaminaba
entonces el grupo. Ante ellos
iba un buey; sus cuernos estaban
cubiertos de oro, y su cabeza
adornada con una guirnalda de
olivo, y delante de todos iban
los hombres que tocaban y
mostraban el camino de
Jerusalem. Cuando llegaban a la
Ciudad Santa ornamentaba cada
uno el canasto con sus
primicias, y los altos
dignatarios salían a su
encuentro y les decían: ¡Sean
bienvenidos, hermanos! Las
flautas les conducían hasta el
Templo, y allí cada uno cargaba
sus primicias sobre su hombro y
las depositaba ante el altar,
pronunciando las palabras del
versículo 5 hasta la mitad del
versículo 10. Aun el rey
debía llevar sus primicias, como
todo judío. Esta ofrenda
significaba el reconocimiento
del orden divino en la
naturaleza y de la existencia
del Ser Supremo, a quien se
consagraban los primeros frutos
en señal de agradecimiento. Los
cuernos del buey estaban
cubiertos de oro, lo que
significaba que el trabajo lleva
al pueblo a la prosperidad, y
sólo una prosperidad basada en
el trabajo es la verdadera. El
buey llevaba sobre su cabeza la
rama del olivo: El olivo es el
símbolo de la luz de la
sabiduría y de la ciencia, es
decir, que la prosperidad no nos
debe llevar solamente a un
ficticio progreso material, sino
a un verdadero avance en el
orden del espíritu. Vemos pues
aquí unidos los diversos
factores de la sociedad, todos
puestos a su servicio. El
trabajo, la prosperidad, la
ciencia, deben estar sometidos
al hombre, y sólo así conservan
su sentido. Pero, sobre todo,
tenemos el símbolo máximo:
Adelante iban las flautas que
mostraban el camino hacia
Jerusalem. El trabajo, la
prosperidad social, la ciencia y
la sabiduría pueden ser
meritorias en si, pero no
cumplir enteramente con la
misión que les ha sido
encomendada. Puede el hombre
conocer la próxima estación,
pero no la meta final, y
quedarse en el camino creyendo
haber llegado a su destino.
Todos los grandes atributos
humanos no tienen ningún valor
si no son dirigidos hacia el
ideal supremo. El trabajo se
puede convertir en esclavitud,
el dinero en opresión, en
riqueza y en pobreza; la ciencia
puede ponerse al servicio del
mal y usar sus recursos para la
destrucción y el aniquilamiento.
La vida toda del hombre es una
espada de dos filos. El deber
del hombre es pues encaminar su
vida con la vista puesta en una
meta superior: Jerusalem. en
donde, Según los profetas, todos
los pueblos de la tierra se
reunirán para adorar a un mismo
Dios, padre de la humanidad
entera.*
|
¡Maldito aquél que
hiciere errar al ciego en el camino! Y dirá todo el
pueblo: ¡Amen! * |
Errar al ciego en el camino
No se trata propiamente de un ciego, sino de la persona que no
sabiendo qué resolución tomar en
determinada circunstancia, es
inducida al error
intencionalmente. *
|
¡Maldito aquél que hiriere ocultamente a su prójimo! Y dirá todo el
pueblo: ¡Amen! * |
Hiriere ocultamente al prójimo
Herir al compañero ocultamente
quiere decir aquí calumniarlo en
su ausencia. *
|
Bendito serás en la ciudad y bendito serás en el campo. * |
Bendito en la ciudad y en el campo
En su sentido literal quiere
decir que quien permanece fiel a
la ley de Dios, será bendito en
el campo, en la ciudad y en
todas partes, pero el Midrash
interpreta el texto así: "El
hombre justo y piadoso saldrá de
este mundo conforme entró en él;
así como nació inocente, morirá
inocente, así como fue puro
cuando vino al mundo, lo será
hasta el último día de su vida;
llegó al mundo sin pecado e
igualmente exento saldrá de él".
En cuanto a la promesa: "Bendito
serás en la ciudad..." etc.,
éste se afirma aun en la
diáspora, cuando el israelita
ocupa el lugar que le
corresponde en las obras
sociales del país donde se
encuentra, esparciendo
bendiciones a su alrededor por
medio de los mandamientos de su
Ley y por sus buenos principios.
El país que por una razón u otra
le persigue, se da cuenta tarde
o temprano, del error
cometido. *
|
Bendito será tu canasto y tu artesa. * * |
Tu canasto
Que siempre estará lleno de frutos. *
Tu artesa
Que siempre estará llena de masa. *
|
El Eterno mandará que la bendición esté contigo en tus graneros y en toda empresa de tu mano; y te
bendecirá en la tierra
que el Eterno, tu Dios,
te da. * |
La bendición esté contigo
Dondequiera que el israelita
viva, en América del Sur como
del Norte, en oriente como en
occidente; cualquiera que sea su
suerte y condición de vida,
estará acompañado por la
bendición de Dios, y todas las
naciones de la tierra verán que
la marca de Dios está sobre él.
Y si oye la voz del Eterno y
observa sus mandamientos, estará
arriba y no abajo, pues su
grandeza viene del cielo, de la
perfección y santidad de su Ley.
No le vendrá nunca de la tierra,
esto es, cuando olvide su alta
misión y adopte como objetivo la
materia o cualquier otra cosa
que le aparte de las leyes
sagradas. Los jajamim nos
muestran una singularidad
ortográfica en hebreo: nega
significa plaga; óneg, dicha o
felicidad; estas dos palabras,
nega y óneg se diferencian sólo
por la colocación de la letra
áyin. En "dicha" (óneg) la áyin
está a la derecha; en "plaga"
(nega), a la izquierda. El
hombre tiene el poder, dicen los
jajamim, de convertir óneg en
nega con sólo permutar la áyin,
es decir, tienen la libertad de
elegir entre el bien y el mal.
Por otra parte, la derecha, la
diestra, simboliza la acción y
la fuerza, mientras que la
izquierda simboliza la
debilidad. El hombre tiene el
poder de la transformación;
puede fenecer ante la materia o
luchar y triunfar por el
espíritu. Puede elegir entre el
bien y el mal, y está en sus
manos transformar el sufrimiento
en felicidad, en óneg. Según la
Toráh no basta liberarse del
mal, hay que transformarlo en
bien; las inmesas aptitudes que
el hombre posee deben estar al
servicio de Dios. Si obedece a
la voz del Eterno, vendrán sobre
él bendiciones (versículo
1-2); de lo contrario, tendrá
que soportar las kelalot (maldiciones)
escritas en esta parashá
(versículo 15-68). *
|
y palparás a mediodía como palpa un ciego en las tinieblas; y no prosperarás en tus caminos, y sólo
serás oprimido y
despojado todos los
días, y no habrá quien
te salve. |
Como palpa un ciego en las tinieblas
¿Qué diferencia hay para el
ciego entre palpar a la luz del
día o en las tinieblas? Rabí
Yosé lo explica en el Talmud:
"Una noche estaba yo caminando
por la calle y me encontré a un
ciego con una antorcha en la
mano. Hijo mío, le pregunté,
¿Por qué llevas una antorcha si
no puedes aprovechar su luz?
Amigo mío, respondió el ciego,
verdad es que yo no puedo ver,
pero mientras lleve esta luz en
mi mano, las personas me verán y
teniendo piedad de mí me
salvarán de los obstáculos, de
las trampas y de los espinos".
Con esto el versículo quiere
decir que, aún con la claridad
del mediodía, palparán como lo
hace el ciego en la oscuridad, y
no habrá quien tenga compasión
de ellos para librarles de los
tropiezos. *
|
Si no guardares para cumplir todas las palabras de esta Ley, las que están
escritas en este libro, para que temas este nombre glorioso y temible, al Eterno, tu Dios, * * |
Si no guardares para cumplir
Nuestros rabinos dedujeron de
estas dos palabras que lo
esencial no es el conocimiento
de los preceptos de la Torah,
sino la acción y la obra. La
teoría y la fe no tienen valor
sino a través del acto que las
concreta. *
Para que temas
este Nombre Glorioso
La Biblia utiliza muchas veces
el nombre de Dios como sinónimo
de divinidad. *
|
Y sucederá que así como
se regocijaba. el Eterno
en vosotros para haceros
bien y para
multiplicaros, así hará regocijar el Eterno (a vuestros enemigos) para haceros perecer y para
destruiros, y seréis
arrancados de sobre la
tierra adonde vais para
tomar posesión. * |
Así hará regocijar el Eterno
La doctrina judaica no admite el concepto de un Dios cruel y
vengativo. Numerosas son las
citas del Talmud que muestran la
misericordia divina: "Cada día
durante tres horas, Dios se
sienta para juzgar al mundo.
Cuando ve que la humanidad
merece ser destruida por causa
de su perversidad, El se levanta
del trono de la justicia y se
sienta en el trono de la
misericordia" (Avodá Zará, 3:).
Dios dijo por intermedio del
profeta Ezequiel: "Tan cierto
como Yo existo... declaro que no
tomo placer en la muerte del
perverso", etc. (Ezequiel 33,
11). El exegeta Rashí traduce
así este versículo: "Así como el
Eterno se regocijó en vosotros
para haceros bien y para
multiplicaros, así hará
regocijar (a vuestros enemigos),
haciendo que perezcáis y os
destruyáis". *
|
Y el Eterno te hará volver en cautiverio a Egipto en navíos, de cuyo camino yo te dije : "no volverás
más a verle", y allí
desearéis ser vendidos
por esclavos y por
esclavas a vuestros
enemigos y no habrá
quién os compre, (porque
seréis condenados a
muerte). * |
Volver en cautiverio a Egipto
Aunque Dios prohibió a los israelitas establecerse en Egipto (ver
capítulo 27, 16), los haría
volver como esclavos en navíos
(medio más fácil para
transportar esclavos), pero la
mayoría no serían comprados y
perecerían por el confinamiento
y el hambre. *
Comentarios a la Haftará
Yishayahu Isaías 60:1-22
En ésta, la última de las siete
Haftarot de Consolación, el
profeta Isaías convoca a
Jerusalén a que salga del dolor
de la oscuridad y las sombras,
para brillar ante el mundo en
todo su esplendor. La luz de la
redención, tanto física como
espiritual, se irradia en ella.
Sus hijos, hace ya tanto tiempo
exiliados, están de regreso, y,
tras ellos, las naciones del
mundo, que finalmente han
admitido que Hashem y que el
pueblo judío son sus emisarios.
Esta redención, a diferencia de
las que la precedieron, será una
redención final y completa.
"Nunca más se pondrá vuestro
sol, ni se alejará vuestra luna,
pues Hashem será para vosotros
una luz eterna, y habrán
terminado vuestros días de
luto".
"Los hijos de los extranjeros
construirán las murallas de
vuestras ciudades..." (60:10)
En lo que respecta al pueblo
judío, ellos no necesitaban en
absoluto murallas para su
ciudad. Porque nadie osaba
enfrentárseles, y no les hacía
falta ningún tipo de fortalezas.
Pero "los hijos de los
extranjeros", los no judíos que
habían aceptado las siete leyes
noájicas, sí necesitaban las
murallas. Porque, según el
Rambam, la ley del ger toshav
(el no judío que aceptó las
leyes noájicas) se aplica
únicamente en la época en la que
se acostumbraba tener ciudades
amuralladas.
Por lo tanto, los "hijos de los
extranjeros" construyeron las
murallas para que pudieran tener
el status de gerim toshavim.
Porque una vez que alcanzaban
ese rango, el pueblo judío tenía
la mitzvá de proveerles el
sustento y el bienestar.
La muralla puede ser mucho más
que una mera protección contra
los enemigos...
Canciones que cantamos en la
mesa de Shabat
Tzur Misheló
"La Roca de la Cual Hemos
Comido..."
Mazón Vetzedah Hisbi'a
Lenafshenu
Con comida y alimento satisface
nuestras almas
Hay dos categorías de comida:
Las necesitadas como el pan, a
las cuales se refiere como
mazón, y las lujosas como la
carne que están en la categoría
de tzedah.
Esta distinción es evidente
del análisis hecho por nuestros
Sabios (Tratado Julín 84a) del
termino usado por la Torá
(Vaikrá 17:13) al describir la
manera en que uno adquiere al
animal silvestre o ave cuya
sangre debe cubrir antes de
comer su carne. "Cuando un
hombre atrape su presa..." dice
la Torá, aun cuando el mismo
requerimiento se aplica a aves
que no necesitan trampa. La
lección es practicidad
económica: No comas carne tan
dispuestamente pues puede
afectar tu presupuesto. Dedícate
a su consumo como si tuvieras
que empeñarte en las faenas de
atrapar el animal o ave y
evitaras caer en la pobreza.
De modo que en Shabat, cuando
comemos ambos (pan y carne),
cantamos alabanzas a Hashem por
"satisfacer nuestras almas"
tanto con lo necesario como con
lo lujoso.
PIRKE AVOT
Extraídos de la Ética de los Padres, que se
suele estudiar en los Shabats
del verano.
"Juzga a todos los hombres
favorablemente (concediéndoles
el beneficio de la duda)"
Rabí Yehoshua ben Prajia
Avot 1:6
El acto de juzgar a las personas
en forma favorable no es
solamente un ejercicio de
justicia, sino también una
inversión en nuestra propia
seguridad espiritual.
Uno de los frenos más poderosos
del mal comportamiento es el
temor de ser objeto de
desaprobación de la sociedad.
Pero esto funciona únicamente
cuando uno respeta a sus amigos
y a sus vecinos, considerándolos
individuos de elevado nivel
moral. Si uno juzga con dureza
cualquier comportamiento
cuestionable que es un
componente inevitable de la
conducta humana, puede llegar a
la conclusión de que ninguna de
las personas que están a su
alrededor son de buen carácter
y, entonces, ya no sentirá
vergüenza de comportarse en
forma avergonzante en su
presencia.
PROMESAS DE HASHEM
Isaías 60:21
Ve'amek kulam tsadikim
le'olam yirshu arets netser
mata'ay ma'aseh yaday
lehitpa'er.
Y los que quedarán de tu pueblo,
todos ellos serán justos, ellos
heredarán para siempre la
tierra; renuevo plantado por Mí
mismo, obra de mis manos es él
(mi pueblo), y por él seré
glorificado.
Escrito y Recopilado por: Rabino
Yaakov Asher Sinclair de
la Organización Ohr Somayach de
Israel y Monsey. Editado por el
Maestro y Periodista Eliyahu
BaYonah, Director de la
Organización Shalom Haverim de
Monsey, New York.
Email: eliyahubayonah@gmail.com
SEA PARTE DE ESTE PROYECTO JUDEO-HISPANO